En las empresas familiares, generalmente se observa que lo habitual
es una segmentación basada en las tradicionales “estructuras funcionales”,
como:
- Producción
- Comercial
- Administración …
Dependiendo del tamaño de la empresa, al frente de estas
funciones están unos directivos con edades no muy distintas a las del fundador,
que han ejercitado habitualmente su autonomía más para acomodarse al estilo
personal de su jefe, al que conocen muy bien por la prolongada experiencia de
trabajar con él, que para prepararse y acoplarse a la evolución de los
productos, mercados y tecnologías.
La organización es
dirigida por el fundador y conduce a dos situaciones:
- A que la única persona con capacidad y autoridad para integrar es él.
- A que sistemas que tienen un alto potencial para la integración de la empresa, como son ; formulación de una estrategia explícita, el diseño y seguimiento de reglas formalizadas para la toma de decisiones y la comunicación, están poco desarrollados o su desarrollo se ha producido con un esquema cortado a medida de las necesitadas del fundador.
Sin bien el nivel desarrollado de la estructura de
responsabilidades es importante e influyente en la sucesión, no hay que olvidar
que es todavía más importante el nivel de:
- Capacidades
- Conocimientos
- Actitudes
de las personas con las que han de trabajar los sucesores.
Personas que, con frecuencia, son de edad bastante superior a la de los
sucesores.
En la empresa familiar, para disponer de directivos con
capacidades adecuadas para la sucesión y una estructura de responsabilidades
desarrollada, hay tres temas importantes
a emprender:
• Generación de poder
Es bien sabido que el poder es un recurso escaso en la empresa familiar, en el sentido de que en este
tipo de empresas suele haber más personas con deseos de ostentarlo que
oportunidades se dan para otorgarlo.
Por ellos, debe llevarse a cabo una segmentación y agrupación
de responsabilidades directivas, de manera que aparezcan auténticos y
necesarios puestos directivos en los que ejercer poder, es decir, segmentar para generar verdadero poder,
y así abrir oportunidades para:
- Varios miembros de la siguiente generación
- Otros directivos con edades inferiores a las del fundador
- Su primer equipo de colaboradores
puedan habituarse en actuar con autonomía y en las difíciles
tareas de integrar a sus subordinados, e integrarse ellos mismos con otros
mandos y directivos de la empresa.
Es conveniente que existan unidades de estructura concretas,
y de una manera especial cuando se trata de unidades estratégicas de negocio,
facilita que en la empresa se extiendan los sistemas de información y control
hasta hacer de ellas:
- Centros de beneficios
- Centros de emprendimiento
con lo cual se posibilita la apreciación de las capacidades
de sus gerentes, en especial las de
emprendedores e integradores, al mismo tiempo que se hace más fácil establecer
un ordenado ejercicio de rendición de
cuentas, siempre necesario, pero mucho más cuando la empresa familiar tiene
más de un propietarios.
Finalmente, la generación de poder, lograda en base a una
acertada segmentación en distintas unidades, permite evitar el problema de que
los miembros de la familia con edades parecidas, por ser de la misma
generación, estén unos a las órdenes de otros.
En caso contrario, lo que ocurre es que los miembros de la
siguiente generación reciben responsabilidades poco definidas y para las que no
están preparados.
• Sistemas de dirección
Son herramientas i medios que se emplean para orientar,
ayudar u animar a los directivos en su esfuerzo personal por alcanzar los
objetivos que se les han encargado.
Los sistemas más importantes de toda organización son:
- Control estratégico, Información y comunicación: Enfocados al conjunto de la empresa y unidades de estructura significativa.
- Rendición de cuentas, Evaluación de directivos y mandos: Enfocado a la actuación de la persona y del grupo que dirige, en consecución de los objetivos concretos que se les han fijado.
- Desarrollo profesional, Promoción, Remuneración fija y variable: Enfocados a la persona, su permanencia en la empresa y su captación para el futuro.
En la empresa familiar, de una manera especial en sus
primeras épocas, aunque estos sistemas existen y se aplican, suelen tener un
bajo grado de formalización, pues, en algunos casos, se espera que emerjan de
forma natural conforme se experimenta con ellos aplicándolos de una manera muy
informal y, en otros casos, corresponden a una organización con muy pocas
personas.
Con la incorporación de miembros de la siguiente generación,
y los cambios en las relaciones de trabajo de los directivos más antiguos con
los nuevos, hace preciso que dichos sistemas de dirección, como reglas de juego
que son, sean y queden claros, se acepten y se apliquen ordenadamente.
Hay que cuidar especialmente el sistema de evaluación de los
conocimientos, actitudes y aptitudes, puesto existe el riesgo de confundir el hecho de:
- Ser propietario
- Poseer la capacidad de dirigir
y en consecuencia, asignar responsabilidades a quien no está
preparado y negárselas a quien lo está.
Otro sistema a diseñar cuidadosamente es el de la
remuneración, por la extraordinaria importancia que tiene en la empresa
familiar el que todos los que trabajen en ella sean justamente tratados en
cuanto a sus sueldos.
• Órganos de gobierno
Está habitualmente constituido por:
- El Comité de dirección: el cual tiene que estar integrado por los directivos de mayor nivel de la empresa, y tiene como misión que éstos se coordinen y participen en la formulación de la estrategia y el control de su cumplimiento.
- El Consejo de administración: que tiene como misión, además de las establecidas en la legislación, supervisar el modo cómo lo directivos ostentan el poder, debe aportar recursos – especialmente conocimientos- a la dirección de la empresa, y esforzarse en la mejora de sus directivos.
En las empresas familiares, es frecuente que estos dos órganos
estén pocos desarrollados, llegando incluso a confundirse en uno solo y no muy
activo, pues el fundador ostenta la mayoría del capital y tiene el consejo de
administración que él prefiere y, al ser propietario-director general, maneja
el comité de dirección como le parece oportuno.
Pero cuando el fundador desaparece y la propiedad pasa a la
siguiente generación, la empresa familiar se encuentra con que hay varios
accionistas con derecho a formar parte del Consejo de administración y, muy
probablemente, con un claro interés por vigilar cómo otras personas, miembros
de la familia y directivos, manejan su patrimonio.
Desarrollar la organización es perfeccionar sus modos de
trabajo en aspectos como:
- El tipo y frecuencia de la reuniones
- El establecimiento de la agenda de trabajo
- El diseño de la información a aportar
- La redacción de actas, etc.
La actuación del
sucedido en la fase final del desarrollo es extraordinariamente importante, no sólo porque ha
de elegir sucesor y no equivocarse, sino
también porque ha de hacer realidad la transferencia de poder en un período de
tiempo, que el resto de la familia y la organización acepte.